Y esta lucha fue mi acompañante por mucho tiempo. Queriendo demostrar mi valía y tratando de alcanzar una perfección que sólo existía en mi mente. Y este deseo de perfección lo expresé de muchas maneras; en la escuela, en mi previa carrera como actriz y modelo, y sobre todo en mis relaciones con mis parejas y los demás. Aceptando relaciones que solo me hacían daño. 

Además de mi propia lucha conmigo misma, reconocía dos corrientes paralelas dentro de mí: el llamado a una vida espiritual profunda y mi deseo de salir al mundo y triunfar. Tomé la decisión de dejar mi país, familia, amigos y relaciones para forjarme un camino en el mundo de las artes. 

Mis pronombres son ella/ellas. Vivo y trabajo en territorio no cedido de las naciones indígenas Kizh y Tongva. Conocidas colonialmente como Newport Coast, California en Los Estados Unidos. Nací en la Isla de Borikén, colonialmente conocida como Puerto Rico. Mis padres originalmente son de Kiskeya colonialmente conocida como República Dominicana. Soy fruto de la colonización del Caribe y la mezcla de varias razas: Taina, Negra y Blanca Europea. Estas son algunas de mis identidades que apenas voy reclamando. De hecho, muchas partes de mí -no tan sólo de mi identidad- he ido conociendo, perdonando, aceptando y reclamando- el amor propio, por ejemplo.

Fuí afortunada de crecer con mucho amor por parte de mis padres, sin embargo, eso no detuvo las corrientes del dolor y sufrimiento cuando mis padres decidieron divorciarse. Esto creo un sentimiento de ausencias, abandonos y confusión; mientras que mis padres (en completa inocencia y siempre deseando lo mejor para nosotros) hacían maniobras para rehacer sus vidas y tratar de proveernos seguridad. Pero las cosas no son tan sencillas como parecen y la experiencias son subjetivas. Los seres humanos internalizamos la vida de maneras distintas y los efectos de la misma son como las ondas de mar; siempre luchando para llegar a la orilla. 

Estaba perdida y rota. Fueron muchas las tormentas que obligaron a ir a la profundidad. Y de rodillas y con lágrimas en los ojos- me levante- apoyándome sólo en mí misma, y comencé a nadar. Y poco a poco a sanar. Y encontré mi camino. El camino que me llevó de vuelta a mi propio ser, mi propia fuerza, belleza y resiliencia. 

Y pasado el tiempo, me volví a enamorar y cree una familia.

Un día, sin esperarlo, sentí un llamado espiritual profundo, como nunca lo había sentido. Y mis dones espirituales, regresaron para nunca marcharse. Y en el 2012, acepté el llamado y emprendí viaje...Y finalmente, después de altos y muy bajos- he vuelto a casa!

Si deseas saber que resultó de este llamado, sigue leyendo abajo! Gracias, por haber leído hasta aquí.

Decidí mudarme a Los Angeles, California en busca de mi propia estrella. Aunque esta ciudad me acogió con los brazos abiertos, el prospecto de convertirme en estrella de cine se hacía cada vez mas lejana. Y para añadirle al dolor, la relación más significativa para mí (hasta ese momento) terminó de una manera que no me lo esperaba.

Si deseas leer un artículo que escribí sobre esta relación y como pude sanar y aprendí a amarme a mí misma, puedes hacerlo aquí.

Además participo en causas humanitarias y soy defensora de la justicia social. 

Comencé a entrenarme y certificarme en diferentes modalidades de desarrollo personal. Abrí mi consulta y continúe estudiando y certificándome en diferentes areas y filosofías espirituales. Una de estas, la filosofía y psicología Budista. Este se convirtió en mi refugio. Empecé a meditar, y a conocer mas del Darma sobre todo el linaje del Budismo Temprano de Theravada y Tibetano. Através de esta filosofía me conocí a mí misma y aprendí a como navegar las tormentas de la vida. Con la práctica de Mettā ó Bondad Amorosa para conmigo misma sanó mi percepción malsana de no creerme suficiente en la vida. Las Tres Joyas: el Buddha (ejemplo que sí podemos despertar de la ignorancia), el Darma (la filosofía y enseñanzas) y el Sanga (la comunidad espiritual) se volvieron mi refugio. Y hoy en día practico y enseño esta filosofía en conjunto con el Misticismo Cristiano (Inter-Spiritual) ya que este último ha influido mi vida desde niña.